Aviso: TIMOS / ESTAFAS
Si bien siempre han existido personas que han tratado de realizar estafas o timos, en lo últimos tiempos estos intentos están proliferando y varios de ellos van dirigidos a engañar a los/as empleados/as de hostelería. Os detallamos alguno de los sistemas utilizados:
♦ Sucedido esta misma semana: Una persona llama al local. Según parece antes de eso, a través de llamada telefónica o de cualquier otro medio ha conseguido los nombres de los encargados o de alguna persona de referencia. Se hace llamar un tal Alfonso y dice que llama del Área de Trabajo del Ayuntamiento, que está con el encargado en cuestión y que hay que hacer un ingreso inmediato de 1000 o 1500 € porque si no el local va a recibir una multa de 5000 €. A continuación, le dan instrucciones a la camarera de cómo abrir el cajón de dinero (en el caso del asociado que denuncia el hecho sabían que tenía un Cash Logic) para coger el dinero del interior. Con ese dinero le hicieron ir a una oficina e ingresarlo en una cuenta de Bitcoin e ir al FNAC a comprar tarjetas de Apple de teléfono.
♦ Otro sistema parecido viene dándose cuando llama una persona haciéndose pasar por Iberdrola, conoce los datos completos del titular del negocio y dice que hay una factura pendiente de pago y que si no se abona inmediatamente, proceden a cortar la luz del local. Para evitarlo, dan instrucciones con una cuenta donde hacer un ingreso.
♦ Un tercer tipo de estafa que se está produciendo, esta vez alertado por la Ertzaintza, es el “timo del mexicano”. Consiste en suplantar la identidad de empresas de mensajería para obtener dinero de las víctimas. Los estafadores, tras recabar información sobre el establecimiento, contactan telefónicamente con los/as empleados/as. Se presentan como representantes de una empresa de mensajería y, bajo la excusa de entregar un paquete o documentación importante, solicitan un pago en efectivo. Para aumentar la credibilidad, suelen conocer detalles del negocio, como el nombre del gerente o la ubicación de la caja registradora.
Amenazan con despedir a los/as empleados/as si no realizan el pago o incluso llegan a proferir amenazas de violencia contra ellos/as o sus familias