¡Cómo me gustaría convenceros!
Existen dos situaciones que afectan a muchas de nuestras pymes y microempresas hosteleras y que me llaman especialmente la atención: una está vinculada al tema fiscal y la otra a las relaciones laborales. Mi intención con estas líneas es abrir una pequeña reflexión sobre ambas cuestiones.
- En el ámbito fiscal la declaración más importante para los empresarios es la del IRPF (I.S. en el caso de personas jurídicas); y el IRPF está vinculado a los Rendimientos de la actividad; y los rendimientos de la actividad a una configuración de las cuentas de Ingresos y Gastos…, y todo ello con sus correspondientes soportes contables.
En estos momentos en la Asociación, cientos de empresas centralizan esta gestión (la llevanza de los registros contables); y todo ello se hace a través de un extraordinario programa informático que, en uno de sus resúmenes, nos da el perfil (visión general, sentido común,…) de cada empresa. Y desde nuestra obligación de proteger al afiliado, hacemos un seguimiento para lo que hemos confeccionado un código de colores privado que aplicamos a cada empresa. Tras el análisis de esos datos:
- Los que tienen una visión perfecta (verde intenso): sólo el 3%.
- Podríamos situar en sobresaliente (verde suave): hasta un 5% más.
- Algunos presentan una visión que debe ser mejorada y que todavía no puede formar parte de los grupos anteriores (amarillo intenso): un 30%.
- Los que necesitan bastantes mejoras pero están orientados en el buen sentido (amarillo suave): un 14%
- Por último, aquellos que tienen una situación de clara alarma (rojo): el resto, 48%. Son titulares que por las circunstancias que sean, no terminan de aceptar que se ha producido un profundo cambio en la gestión, y descuidan la aportación, control y anotación de documentos (por omisión u otras deficiencias).
Y si esto pasa con un programa excelente y con una gestión tan profesional e involucrada como la que tiene la Asociación, no queremos pensar qué sucederá en los casos no supervisados por nosotros; y este es un problema que este año debe quedar resuelto.
- En el ámbito laboral, los establecimientos que tienen asalariados deben reflexionar también sobre los riesgos que pueden estar vinculados a las relaciones laborales: con que la décima parte de lo que afirman los sindicatos fuera cierto (sobre empleo oculto, excesos de jornada o contrataciones no ajustadas a la misma o…), estaríamos ante una situación que merece una reflexión; y ello debe ser así porque la administración del estado, sea del signo que sea, va a intentar hacer aflorar estas situaciones para dulcificar las estadísticas (y ello al margen de lo injusto que puede resultar -desde el punto de vista de competencia desleal- para el resto de empresas hosteleras o desde la óptica de la legalidad).
No pretendo impartir lecciones de moralidad pero, a nada que la administración apriete en cualquiera de estos dos temas, pueden existir múltiples empresas con serios problemas de supervivencia. Y si alguien duda de que van a apretar, es evidente que no compartimos una visión común del entorno institucional.
Ángel T. Gago
Secretario General Ejecutivo