El otro día hablaba con una familia propietaria de un establecimiento de alojamiento y me comentaba que no hace tanto tiempo los clientes literalmente llamaban a la puerta y que tenían el privilegio de poder elegir a sus huéspedes según “su pinta”. Pero que eso ha cambiado y que menos mal que su hija “les ha puesto” en internet ya que todas las reservas llegan a través de ese medio. Es más, me contó que en ocasiones reciben llamadas solicitando información sobre el alojamiento pero que en el momento de la reserva dicen que prefieran hacerla por internet, que les da más confianza. Y esto es sin duda uno de los motivos por los que los hosteleros deciden dar el paso (aunque sea pequeñito y de puntillas) al mundo online. Leer más